viernes, 19 de noviembre de 2010


Que sí, que me lo dicen tantas veces, que al final me lo voy a acabar creyendo. Que soy raro. Pero no un raro cualquiera, sino un raro de verdad. Raro porque no me gusta el fútbol. Raro porque me aburre ver carreras, ya sean de coches o de motos, de bicicletas o de sacos. Raro porque no me siento identificado por ningún escudo ni camiseta, sea esta del equipo de mi pueblo o del equipo del pueblo de ahí al "lao" . Raro porque no sé jugar ni al tute, ni al mus y tampoco tengo ganas de aprender. Que odio los juegos de cartas, coño. Que sí, que vale, que soy muy raro. Raro porque el baloncesto me parece un coñazo y el tenis aun mucho más. Porque no me gustan los 40 Principales ni Cadena Dial. Porque odio Tele5 y no soporto los ladridos ni de Enrique Iglesias ni de David Bisbal. Raro de cojones porque no entiendo la competición. Porque abogo por la igualdad y en lo que yo entiendo por igual, nadie es mejor que nadie si la suerte no está de su favor. Raro porque me cabrea que todo dios sepa quien es Belén Esteban o Rafa o Nadal y solo unos pocos conozcan el trabajo de un tal Pedro Cabanas. Raro porque si me preguntan por Pedrosa, digo que es un pueblo de Burgos y si lo hacen por Hiniesta (o como se escriba), contesto que un pueblo de Zamora. Si, lo se, soy un tipo raro porque no me gustan las banderas, sean rojas, verdes o amarillas. Raro, porque ni patriota ni nacionalista. Raro porque odio ver la tele y a veces me gusta pasear en soledad observando cosas que ya las tengo vistas. Raro porque critico lo que no me gusta y protesto ante lo que considero injusto, en lugar de cerrar el pico y tragar mierda como hacen los borregos y alguno más que yo me sé. Raro porque aunque mi pasión sea la música, me revientan los productos creados bajo la tutela de un soplapollas experto en hacer dinero que se empeña en hacerme creer que esa mierda que suena por la radio previo pago es una canción. Raro porque aunque me siento estafado por los intocables de la SGAE, me sigo comprando aquellos discos que de verdad merecen ser comprados y no bajados de la red por la puta cara, porque en realidad eso es robar. Robar la creación de un artista. Raro porque no entiendo que haya una iglesia en cada pueblo y solo una ambulancia y un parque de bomberos por cada cincuenta pueblos o a veces más de cien.

Soy raro porque no me gusta la caza ni tampoco me hace gracia el cazador. Porque procuro no matar ni a las hormigas y porque no considero fiesta nacional el ver sufrir a un animal. Raro porque una vez visité el Guggenheim, salí de allí diciendo -vaya mierda- y me prometí no volverlo a visitar, salvo un compromiso, digamos que por obligación, como el que me llevó a hacerlo aquella primera vez. Raro porque me gusta el vino, pero me repatea toda la tontería que hay alrededor de él. Porque el vino sabe a uva, no a cereza. Y su color es el de la uva, no el de la cereza. Y todos los vinos son afrutados, porque todos salen de una fruta llamada uva, menos la mierda de Don Simón y alguno más que venden en brik, que salen de vete tú a saber donde. Y ni son vinos, ni son "ná". 

Lo reconozco. No me queda otra. Soy raro. Raro de cojones. Raro por creer que quien hoy es idiota, mañana puede ser un gran tipo. Al fin y al cabo, el tiempo y solo el tiempo es quien cura el mejor jamón y convierte en un buen vino a un simple mosto fermentado. Raro porque no reposto en aquellas estaciones donde la gasolina me la tengo que echar yo y no me cobro en aquellas de centros comerciales donde me tengo que cobrar yo y raro porque no obedezco ni me gustan las funciones de los vigilantes de seguridad, porque es una forma ruin de privatizar la policía. Soy raro por desconfiar de los hombres que dicen hablarme en nombre de Dios, cuando Dios jamás les ha pedido que hagan eso por él. Por pensar que a mi gobierno se la sudan mi salud y mi bienestar y solo busca su cartera llena de billetes. Raro porque estoy cansado de lo políticamente correcto y aunque me llames cerdo una y otra vez, prefiero tirarme un pedo y sonreír de placer a sufrir un dolor de tripas del que me tenga que retorcer. Soy raro, claro que soy raro, raro porque escribo tonterías como esta en mi muro, y aunque luego me digas que te gustan y que escriba pronto otra vez y que vuelva a ser el mismo cuando dejo de serlo, en el fondo sé que ahora mismo estás pensando lo que yo: -pero que raro es este tío-

3 comentarios:

Jeijo dijo...

jaja, muy bueno...
más que raro siempre te he considerado, sin ofender, "polemista"

Anónimo dijo...

eres raro jajaja y los que te leemos te guste o no tambien podremos criticar no???eres bueno muy bueno, si tu supieras q yo escribia antes como tu ahora, podriamos hacer un libro entre tu y yo.eres bueno muy bueno.

Anónimo dijo...

Raro o no.... me ha encantado, te has descrito a la perfección supongo, pero te vuelvo a decir que raro o no.... eres tu y eso es lo que vale, sigue siendo tu mismo para que podamos seguir siendo tu amigo!

VANESSA